Cuando nos hablan de una vivienda inteligente o de un hogar digital, siempre lo relacionamos con las soluciones tecnológicas para controlar la iluminación, climatización, seguridad, audio vídeo o consumo energético, cuyo funcionamiento y control se realiza desde paneles táctiles, actuadores, pulsadores, electrodomésticos o Tablet. Sin embargo, este control todavía no se asocia a un mueble.
La domótica ofrece cada vez más opciones para el control de los sistemas y el mobiliario ya es uno de ellos. Acciones como encender la calefacción acariciando suavemente el cabecero del dormitorio o apagar las luces con la palma de la mano sobre la mesa son ahora posibles. Es la madera convertida en una superficie táctil para el control domótico.
Se trata del proyecto Woodtouch para la fabricación del mobiliario del futuro, donde Tecnalia, junto a empresas del sector del mueble como Lan-Mobel, Elson Electronica y Ekoleds, ha desarrollado un nuevo concepto de interacción táctil con el mueble y las superficies de madera que, en el futuro, podrá ser utilizado para dotar de inteligencia al mobiliario.
Nuevo concepto de relación con el mobiliario
Este proyecto aprovecha el cálido tacto de la madera para convertir el mueble en el nuevo centro domótico para el control inteligente y tener así el dominio sobre los dispositivos eléctricos del hogar de forma sencilla e intuitiva.
El usuario puede encender la luz de una habitación, la calefacción o regular la intensidad de diferentes dispositivos eléctricos alimentados a través de la red eléctrica, sin necesidad de pulsar un botón. Es decir, puede controlar diferentes elementos eléctricos así como regular su intensidad, tanto en el entorno del hogar (iluminación, climatización o audio) como de la cocina (tiras de leds o extracción de humos), acariciando el agradable tacto de la madera en el mueble.
Los muebles que incorporan esta tecnología ofrecen un aspecto de calidad con múltiples acabados posibles y disponen de una zona en la que usuario puede controlar diferentes aplicaciones tocando sobre la superficie de madera del mueble.
Esta idea satisface la creciente demanda de medios de interfaz sencillos con los que poder interactuar con los dispositivos eléctricos del hogar. Teniendo en cuenta la competencia existente en el mercado, el proyecto pretende que el mueble, además de actuar como elemento decorativo y soporte, aporte funcionalidades adicionales. Por tanto, los muebles que incorporan esta tecnología, siguen manteniendo su estética y disponen de una zona en la que el usuario puede controlar diferentes aplicaciones tocando sobre la cálida superficie del mueble.
Eliminación de cables
Los hogares tienen cada vez más cables y mandos, debido al creciente número de dispositivos y sistemas que los usuarios compran o instalan en sus viviendas. Ante esta “invasión” de cables que “afean” los espacios de la vivienda, WoodTouch quiere satisfacer la demanda de medios de interfaz sencillos, agradables, “discretos” (menor número de cables posible), que permitan interactuar con los dispositivos eléctricos del hogar.
La electrificación es un reto para el mueble. Por ejemplo, la tendencia a utilizar grandes cabeceros de cama hacía que, para disponer de un interruptor accesible desde la cama, fuera necesario hacer un cajeado en el mismo e introducir un interruptor tradicional, lo cual rompía la estética además de resultar laborioso.
Dado que la madera destaca por ser un material cálido y agradable al tacto, que transmite una sensación de calidad natural, y además, en la vida cotidiana se utilizan interfaces táctiles hechos de metal, vidrio y plástico, los participantes en este proyecto decidieron que la madera también podía convertirse en una interfaz táctil para manejar los dispositivos electrónicos del hogar.
Sensorización
WoodTouch dispone de un elemento de sensorización del mueble y un elemento de control conectable a la toma de corriente eléctrica de los hogares. Existen dos versiones, una en la que la conexión entre ambos está cableada, y una solución sin cables donde la comunicación se realiza por radio frecuencia.
Además, WoodTouch, tiene dos modos de funcionamiento seleccionables. En el primero, al tocar sobre la superficie de madera sensorizada en el mueble, (para controlar, por ejemplo, la iluminación) simplemente se enciende o apaga. En el segundo modo, el usuario, además del encendido/apagado, puede controlar la intensidad. Durante el tiempo que el usuario toca el mueble, la intensidad de la iluminación sube o baja, y cuando el usuario alcanza el nivel de iluminación deseado, no tiene más que levantar la mano.
Unión estratégica: mobiliario y nuevas tecnologías
En definitiva, WoodTouch ofrece un nuevo concepto de relación con el mobiliario doméstico gracias al cual, los muebles adquieren nuevas funcionalidades. Mediante esta unión de un sector tradicional como es el de la fabricación de mobiliario doméstico, con el de las nuevas tecnologías, se han creado nuevas oportunidades de negocio para un sector que atraviesa un momento delicado. Además, esta solución se puede incorporar a prácticamente cualquier mueble independientemente del fabricante, por lo que no se trata de un producto en exclusiva para mobiliario de alta gama.
En el proyecto participa la empresa de Azpeitia Lan-Mobel, que lleva más de 50 años creando ambientes de personalidad en miles de hogares. También están presentes Elson Electrónica, dedicada a la producción y desarrollo de equipos electrónicos; la firma vizcaína EkoLEDS y el centro tecnológico Tecnalia. También destaca la colaboración realizada por el estudio austriaco KMKG que ha dotado de tecnología táctil a su reproductor de música iTree, que combina tradición y modernidad.
El proyecto está en una fase muy avanzada, previa a la producción en serie. Desde Tecnalia esperan lanzarlo al mercado antes de finales de año, si bien varios clientes ya han mostrado su interés por el sistema. Además del sector doméstico, quieren dirigirse al sector hospitalario para aplicar este proyecto, donde, por higiene, resulta ideal el disponer de superficies planas y fáciles de limpiar, y donde los interruptores tradicionales son disfuncionales.