La Junta de Extremadura ha destinado 562.000 euros a 19 empresas industriales de la región, con el objetivo de impulsar la transformación digital y la innovación tecnológica en Extremadura. A través de este apoyo, las empresas pueden incorporar herramientas de simulación y gemelos digitales en sus procesos, una tecnología que crea una representación virtual de instalaciones, equipos o líneas de producción, permitiendo analizar y optimizar operaciones sin interrumpir la actividad real. Estas acciones forman parte de la Estrategia de Transformación Digital de Extremadura 2027, que destaca la importancia de la digitalización para aumentar la competitividad y productividad del sector industrial de la región.
El uso de gemelos digitales y simulaciones abre nuevas posibilidades para que las compañías experimenten cambios en sus sistemas, detecten posibles errores y prueben mejoras sin tener que realizar grandes inversiones iniciales ni detener la producción. Así, se reduce el riesgo de implementar soluciones incorrectas y se incrementa la eficiencia en la toma de decisiones, lo que se traduce en un ahorro de costes significativo.
Aunque esta tecnología todavía no está muy extendida, ya muestra beneficios claros en la reducción de gastos y optimización del trabajo diario. Desde la administración autonómica, se busca acercar estas herramientas a las pequeñas y medianas empresas para fomentar un entorno de crecimiento y seguridad.
Simulación de procesos industriales con gemelos digitales
El desarrollo e implementación de gemelos digitales no implica necesariamente elevados desembolsos. Se trata de soluciones flexibles y accesibles, aptas para ser adaptadas a las necesidades reales de cada empresa. La simulación previa a la puesta en marcha de cualquier cambio puede suponer la diferencia entre un ajuste exitoso en la producción y una inversión que no produzca los resultados esperados.
Las ayudas también están respaldadas por la existencia de espacios demostradores como el centro DemoTwins. Este centro, impulsado por la Junta de Extremadura y la Fundación Computaex, ofrece un entorno real en el que las empresas pueden experimentar con la digitalización industrial. Además, busca facilitar la adopción de tecnologías emergentes entre las compañías del tejido productivo de Extremadura.
La capacidad de anticiparse a incidentes, optimizar recursos y planificar inversiones contribuye de forma directa a una mayor competitividad empresarial y una industria más preparada. Desde la administración se insiste en que la digitalización no debe verse como un fin en sí mismo, sino como una herramienta para mejorar resultados, ahorrar tiempo y tomar decisiones fundamentadas. Todo ello configura un impulso decisivo hacia un entorno productivo moderno e innovador en Extremadura.