La universidad celebró la jornada Últimos avances en Hogar Digital para tratar el presente y el futuro de un campo que ofrece innumerables posibilidades de mejora para la sociedad, y que se constituye como un área profesional muy atractiva y en plena expansión.
El Hogar Digital contó la semana pasada con un protagonismo especial en la Universidad Europea de Madrid (UEM). Dentro de la Semana de Últimos Avances Tecnológicos para la Sociedad Digital de esta universidad, celebrada del 14 al 18 de abril, tuvo lugar una sesión especial que, bajo el título de Últimos avances en Hogar Digital, y coordinada por la profesora del Departamento de Electrónica y Comunicaciones de la UEM, Yolanda Blanco, contó con la presencia de dos especialistas en el sector de sólida y reputada trayectoria profesional: José Javier Medina, decano del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Telecomunicaciones (COITT), que impartió una conferencia titulada Contenidos del Hogal Digital del Futuro, y Rafael Peña, director y socio fundador de Solprolux, con una intervención titulada Energías alternativas y ahorro energético en el hogar digital.
José Javier Medina centró su intervención en las oportunidades de uso, de mercado y de actividad profesional en crecimiento, todas ligadas, tecnológicamente hablando, a la expansión de la Banda Ancha (unos 200 megas de capacidad para trasportar datos, video, voz, etc…). El hogar digital no sólo consiste en la integración de la Domótica en la vivienda para hacer más confortable la vida al usuario (en ese sentido ya existe un nivel elevado de desarrollo tecnológico en el equipamiento con dispositivos de toda índole: desde la iluminación y la climatización, hasta el ocio y los audiovisuales), sino también en la realización de Instalaciones Distribuidas donde las tecnologías móviles, las comunicaciones inalámbricas aplicadas y los dispositivos portátiles permitan el control de los dispositivos domóticos. Adicionalmente, estas Instalaciones Distribuidas (IHDS) deberán tener en cuenta aspectos tan importantes como Sistemas de Gestión de Edificios, la Normativa de Seguridad Eléctrica y protección contra incendios, y por supuesto el ahorro de energía y el uso de energías alternativas y renovables. Dicho de una forma más familiar: una IHDS sería algo análogo pero con muchísima más envergadura a las actuales ICTs (donde se diseña y gestiona toda la instalación y servicios de telecomunicaciones de un edificio).
La conferencia de Rafael Peña se centró en las energías renovables aplicadas al hogar digital, tema de puntera actualidad. Peña habló en primer lugar del consumo de energía en las viviendas y el impacto ambiental en el sector de la edificación.
En ese sentido, las energías renovables por su eficiencia energética son las alternativas para una edificación sostenible: los datos reales recogidos por distintos estudios demuestran de manera objetiva que las energías renovables constituyen una seria y viable solución al problema del calentamiento global y a la previsible falta de abastecimiento energético por los combustibles tradicionales en un futuro relativamente cercano.
Los gobiernos, organismos e instituciones están apostando por el desarrollo de las energías alternativas tanto a nivel nacional (por ejemplo, a través del Plan de Energías Renovables 2005-2010, que impone que el 30% de la energía producida sea de origen renovable) como internacional (la Cumbre de los 27 de la Unión Europea sobre el Cambio Climático se sitúa en la misma línea); con estas perspectivas debemos tener un punto de optimismo, aunque es mucho el camino que queda por recorrer empezando por una concienciación de la sociedad en general y del individuo en particular.
En segundo lugar, Rafael Peña habló de las nuevas tecnologías en energía solar y fotovoltaica en el hogar del futuro. Este aspecto tecnológico, junto con la importante información sobre la creciente demanda de empleo y formación en el sector, interesó especialmente a un público formado mayoritariamente por futuros ingenieros.
Con estas jornadas, la Universidad Europea de Madrid pone de manifiesto uno de sus principales compromisos: una formación adaptada a la realidad y a los cambios que motiva en la sociedad el avance en las tecnologías.