“Tras la adquisición de Auna en noviembre del pasado año, hemos percibido un creciente interés de los consumidores por acceder a nuestros servicios. De hecho, un porcentaje muy alto de las llamadas que recibimos en nuestro call center proceden de zonas en las que no podemos ofrecer todavía la Experiencia ONO simplemente porque aún no hemos desplegado allí nuestra red de cable”, dijo Fernando Ojeda, director general de Clientes y Servicios de ONO. “Conscientes de que el despliegue del cable es un proceso lento y de que el cliente no quiere esperar, para hacer frente a esta fuerte demanda hemos diseñado ONO Light, una oferta competitiva en precio y calidad, que combina servicios de telefonía e Internet de banda ancha y que en 2007 se completará con el lanzamiento del servicio de televisión”.
Ojeda explicó que el rápido lanzamiento de ONO Light ha sido posible gracias a una serie de acuerdos para la utilización de centrales telefónicas que la antigua Auna (hoy integrada en ONO) tenía concertados en aplicación de la normativa conocida como Oferta de acceso al Bucle de Abonado (OBA) de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT).
Además, el director general de ONO aseguró que el lanzamiento de ONO Light no afectará a sus planes de despliegue de cable. “Sólo en 2006, vamos a invertir cerca de 600 millones de euros en red de cable”, dijo el director general de ONO. En la actualidad, con su red de cable de más de 45.000 kilómetros ONO llega a un mercado potencial de seis millones de hogares, donde tiene más de dos millones de clientes. El lanzamiento de ONO Light incrementa en un 50% (hasta un total de nueve millones) el mercado potencial total al que la operadora puede llegar hoy con sus servicios.
Con el lanzamiento de ONO Light, ONO sigue los mismos pasos que ya han dado en este sentido otras compañías internacionales de cable líderes en países como Italia, Suecia o Francia, y que están recurriendo a tecnologías complementarias de manera transitoria para incrementar su penetración de mercado. En 2008, ONO espera obtener el 10% de los ingresos totales de la compañía a través de esta nueva oferta de productos y servicios.
Cómo funciona
Los servicios de ONO Light se basan en la tecnología conocida como ULL (Unbundled Local Loop o desagregación del bucle del abonado), en combinación con la propia infraestructura de cable de ONO.
Para ello, ONO llega con su propia red de banda ancha hasta la central telefónica local. Allí –a escasos metros del hogar o de la sede de la pyme que ha contratado sus servicios– ONO coloca sus propios equipos, a los que conecta el último tramo de par de cobre de la telefonía tradicional, que le vincula directamente con la residencia del cliente. Por tanto, toda la red, excepto el último tramo, es propiedad de ONO, lo que contribuye a una mayor solidez y calidad de servicio. Los clientes de ONO Light cuentan con las ventajas de recibir una sola factura y de gestionar sus trámites y posibles incidencias con un único centro de atención al cliente. Además, ONO desplaza un técnico a cada residencia para garantizar el servicio y su correcta instalación.
Por últimos estos hogares y pymes se encontrarán, desde el primer momento, preparados para migrar automáticamente a la red de cable de ONO cuando esté disponible en esa zona.
La oferta
ONO Light ofrece al cliente residencial teléfono (cuota, instalación y tarifa plana nacional 24 horas) e Internet de banda ancha de dos megas (módem e instalación incluida) por 34,5 euros al mes. Si prefieren una oferta de banda ancha mini, el precio es de 29,9 euros al mes.