La compañía Schneider Electric inauguró su Innovation Summit 2025 con una ambiciosa propuesta: construir un futuro donde la energía no solo esté disponible, sino que sea inteligente. El evento reunió a más de 5.000 asistentes, incluidos 600 altos ejecutivos de nivel C, en una cita clave para el sector energético global.

En su primera ponencia como CEO de Schneider Electric, Olivier Blum abordó la evolución del panorama energético y destacó la transformación continua de la compañía para responder a las nuevas demandas del sector. Presentó una visión de futuro que consolida el papel de Schneider Electric como socio tecnológico de la energía.
«Todo lo que nos importa; nuestro planeta, nuestra gente, nuestros socios, depende de la energía», señaló Blum. «Pero hoy, la energía debe ir más allá. Debe impulsarnos a innovar, a competir y a crear un futuro sostenible y resiliente. Schneider Electric es su socio tecnológico energético. Electrificamos, automatizamos y digitalizamos cada industria, negocio y hogar, impulsando la eficiencia y la sostenibilidad para todos».
El CEO también alertó sobre el crecimiento acelerado de la demanda eléctrica, que se estima aumentará un 60% en los próximos 15 años. A esto se suma la expansión de las energías renovables, que triplicarán su participación para 2030. Este escenario exige infraestructuras más inteligentes, flexibles y conectadas.
«Estamos viviendo una transformación profunda», señaló Blum. «Los cambios tecnológicos y climáticos no son solo desafíos: son señales claras de que debemos liderar una nueva era. No basta con adaptarse, hay que anticiparse».
Tecnología energética como catalizador del cambio
La visión de Schneider Electric es apostar por la convergencia entre electrificación, automatización e inteligencia digital, dicha combinación la define como ‘tecnología energética‘. Esta visión se materializa en su plataforma EcoStruxure™, que integra software, IA y servicios escalables para optimizar el uso de energía en edificios, fábricas, centros de datos y redes.
Blum destacó varios casos de éxito que ilustran cómo esta tecnología ya está transformando sectores clave. En primer lugar y en colaboración con NVIDIA y EcoDataCenter, Schneider Electric ha desarrollado una fábrica de IA para DeepL, equipada con más de 4.000 GPU y sistemas de gestión térmica automatizados, convirtiéndose en el primer SuperPod DGX GB200 de Europa.
Además, junto a Acciona, ha digitalizado plantas de tratamiento de agua mediante un hilo digital seguro que permite monitorizar procesos y consumo energético en tiempo real. El resultado: menos costes operativos, menos paradas y mayor vida útil de los activos.
Por su parte, en Londres, la consultora Sidara ha creado un entorno laboral inteligente para más de 1.000 empleados, con monitoreo ambiental continuo y una puntuación de confort de 90 puntos según el WELL Building Standard.
Cuatro ejes para la innovación
El Innovation Summit 2025 de Schneider Electric se estructuró en torno a cuatro ejes temáticos que reflejan su visión holística de la transformación energética. El primero, centrado en inteligencia artificial y datos, abordó innovaciones en refrigeración avanzada para centros de datos, diseño de chips de alto rendimiento y gestión inteligente de infraestructuras críticas. Estas tecnologías permiten optimizar el consumo energético y mejorar la eficiencia operativa en entornos cada vez más exigentes.
El segundo eje, enfocado en la vida inteligente, presentó soluciones para hogares prosumidores, aquellos que producen y consumen energía, y redes eléctricas más digitales y resilientes. A esto se sumó la automatización ágil, con plataformas abiertas basadas en software que permiten a las industrias adaptarse con rapidez a los cambios tecnológicos. Finalmente, la resiliencia operativa cobró protagonismo con servicios como EcoCare y propuestas para infraestructura de vehículos eléctricos, que refuerzan la capacidad de respuesta ante desafíos energéticos y promueven una movilidad más sostenible.
Colaboración como motor de progreso
Blum cerró su intervención destacando la importancia de las alianzas estratégicas y la co-creación. «Los retos que tenemos por delante son demasiado grandes para afrontarlos en solitario», afirmó. «La conexión y la colaboración son las que desbloquean todo el potencial de las posibilidades».
Blum dibujó una visión de futuro en la que la energía no solo está disponible, sino que es inteligente; donde los hogares y las industrias generan más de lo que consumen y donde las infraestructuras se adaptan en tiempo real. «El futuro no es algo que esperamos: es algo que construimos. Construyámoslo juntos», concluyó.
La elección de Copenhague como sede del Innovation Summit responde a su compromiso con la sostenibilidad, la innovación y la infraestructura avanzada. Durante dos días, más de 100 ponentes lideraron 50 sesiones, acompañadas de encuentros paralelos entre CEOs, emprendedores y socios del ecosistema Schneider Electric, fomentando el diálogo y la colaboración para acelerar la transición energética global.