El Ayuntamiento de Zaragoza, a través del Área de Urbanismo y Equipamiento, ha anunciado que desarrollará un protocolo de ventilación adaptado a las instalaciones de cada centro educativo público de infantil y primaria. Para ello, se realizará un programa que se desarrollará y aplicará en cada colegio, en el que utilizarán medidores de CO2 para conseguir unas condiciones de ventilación adecuadas, confort térmico y ahorro de energía en las aulas.
Este proyecto cuenta con la colaboración del Laboratorio de Investigación en Fluidodinámica y Tecnologías de la Combustión (LIFTEC, Centro Mixto de la Universidad de Zaragoza y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, CSIC).
El ayuntamiento distribuirá a los colegios de la ciudad sensores de CO2 y temperatura, y se formará a los equipos educativos y de mantenimiento sobre el funcionamiento de estos dispositivos. Los sensores monitorizarán los niveles de CO2 en cada aula, que deberán estar por debajo de las 700 ppm (550 ppm en los pasillos), ayudando a ajustar de manera adecuada la ventilación.
Creación del protocolo de ventilación
Con este fin, deberá establecerse una rutina para ir rotando los equipos entre las distintas aulas del centro. Esto permitirá generar plantillas específicas de registro de las mediciones, que mostrarán el comportamiento en cada aula. Además, se realizará un análisis, registro y estudio de los datos recopilados por los sensores de todos los centros educativos, que dará lugar a la redacción de los protocolos de ventilación.
De esta manera, tras un periodo inicial de caracterización, se podrá ajustar con relativa facilidad la ventilación más adecuada en cada momento. Se asignará un responsable en cada centro, quien conocerá las pautas para el manejo del sensor y la puesta en marcha del protocolo de ventilación. Esta persona contará con el asesoramiento continuo de los servicios de arquitectura, LIFTEC y grupo Aireamos, para la instalación y uso del sensor, el ajuste de ventanas, etc.