El Auditorio de Zaragoza Princesa Leonor ha finalizado las obras de renovación para mejorar los sistemas de sonido e iluminación, y aumentar la accesibilidad en las instalaciones del edificio. El proyecto ha contado con una inversión de 900.000 euros.

El nuevo sistema de iluminación cuenta con tecnología LED de última generación, que ofrece mayor potencia lumínica con un consumo energético optimizado, lo que se traduce en un ahorro cercano al 80%. Su sistema óptico de focales es 40 veces más preciso que los sistemas de encuadre tradicionales y el sistema de mezcla de color avanzados obtiene una paleta cromática más amplia y transiciones mucho más suaves.
Con este nuevo equipamiento, más silencioso, preciso y eficiente, la Sala Mozart ganará en intensidad y calidad de luz y en eficiencia operativa, además de suponer una reducción de gastos eléctricos y una capacidad artística mucho más versátil.
Entre los cambios que ha experimentado el Auditorio de Zaragoza Princesa Leonor, destaca el aumento en la accesibilidad de sus instalaciones. A los bucles magnéticos instalados el pasado mes de febrero en las salas Mozart y Galve (al que se añade un sistema portátil en la sala Multiusos) se han sumado los trabajos para mejorar el acceso al escenario y la sala para personas con movilidad reducida y la adaptación de un ascensor desde la planta baja hasta la planta noble.
Mejor sonido en las salas Mozart y Galve
Según la información aportada por el Ayuntamiento de Zaragoza, esta inversión ha permitido mejorar la acústica de las salas Mozart y Galve con la instalación de equipamiento sonoro de la marca alemana d&b audiotechnik. Esta cuenta con una reverberación óptima para la música sinfónica, coral y de cámara, gracias al preciso trabajo de ingeniería acústica que se realizó en 1994. Sin embargo, cuando se trata de otro tipo de espectáculos, es necesario que el equipo sonoro evite que esta reverberación se convierta en un impedimento.
La nueva sonorización cuenta con un altavoz que de forma nativa es capaz de controlar la directividad de todas las frecuencias audibles. De esta manera, se consigue un sonido nítido e impactante en las áreas de audiencia, minimizando al máximo radiaciones a zonas no deseadas como puede ser el propio escenario.
Además, cuenta con la tecnología de proceso digital Array Processing, que lleva los arreglos en línea a un nuevo nivel. Este sistema procesa cada uno de los recintos acústicos de forma individual teniendo en cuenta la arquitectura de la sala y la disposición del propio arreglo, con el objetivo de lograr un equilibrio tanto en niveles de presión como de respuesta en frecuencia, desde la primera a la última de las butacas.