Más de la mitad de los enlaces a Internet desde los hogares y pymes se realizarán en el 2005 a través de redes de cable de televisión utilizando un cable-módem o a través de la red de telefonía tradicional de cobre usando tecnología ADSL, según el estudio independiente publicado ayer por la Comisión Europea sobre el desarrollo de las plataformas de acceso.
Así, el cable-módem y la tecnología ADSL se convertirán rápidamente en tecnologías punta utilizadas para acceder a los servicios de Internet de alta definición. Sin embargo, el estudio subraya también que habrá importantes diferencias entre los Estados miembros en el ritmo de adopción de esta tecnología.
El desarrollo actual deja ver –añade el informe– que la incorporación del acceso de banda ancha en los hogares y pymes será más rápido en los estados miembros que tienen la tasa más elevada de penetración de Internet en los hogares o las pymes, ya que la demanda para un acceso más rápido a la Red es más fuerte donde hay más adeptos.
Asimismo, según los autores del estudio, se extenderá mejor como donde se haya liberalizado el mercado telecomunicaciones más rápidamente, ya que la competencia entre los distribuidores de la tecnología ADSL traerá precios interesantes, y si el cable está en competencia directa con el ADSL.
Sin embargo, la Comisión Europea considera que el ADSL y el módem-cable no serán más que soluciones de transición. La capacidad de transmisión de ambos sistemas no superará, en el mejor de los casos, los dos megabits/segundo para la mayor parte de los usuarios, lo que podría ser insuficiente para aplicaciones y contenidos multimedia de gran tamaño en ´bits´.
La fibra óptica, por el contrario, ofrece una amplitud de banda casi ilimitada, lo que la convierte en una tecnología de futuro. De aquí a 2010, la fibra óptica (conexión en la acera o en el interior de los hogares) podrá ser utilizada al menos uno de cada tres enlaces a Internet particulares de la UE.
No obstante, existe cierta incertidumbre sobre la velocidad del desarrollo de las redes de fibra óptica a causa de sus elevados costes. Hoy en día, no existe modelo comercial fiable para la fibra óptica dado que los clientes no están dispuestos a pagar por una velocidad más elevada sólo por placer.
Por tanto, concluye el informe, el futuro de la fibra óptica dependerá de la demanda de los usuarios para aplicaciones y contenidos de Internet que necesiten una capacidad superior a la que ofrecen otras tecnologías de acceso.